La base de toda relación sana es el respeto, es una afirmación que se explica por sí sola. Pero es tan importante para nosotros como seres sociales que somos, que me animo a hacer algunos comentarios.
Hay dos términos claves en esta frase sobre los que quiero ahondar: relación sana y respeto.
Relación sana
Vivimos en un mundo de interacciones, donde todos estamos conectados con todos. Algunas influencias son más cercanas que otras. Algunas influencias son más fuertes que otras. Pero lo cierto es que estamos total y completamente conectados entre todos.
No es casual que culturas antiguas como los Mayas, utilizaban el saludo In´Lackech, que significa “Yo soy otro tú”.
Esto quiere decir que relacionarnos es inevitable, pues está dado por la naturaleza misma de la Existencia. No sólo nos relacionamos con otras personas, con nuestras mascotas y nuestras plantas. Tenemos relaciones con todo lo que existe: con las casas, los autos, las rocas, los ríos y todo lo demás.
Todo es energía. Es por eso que una relación se caracteriza por la manera en que las energías de dos o más identidades se combinan, intercambian e interaccionan. Se puede decir que una relación es sana, cuando ninguna de las identidades de la relación obstaculiza, bloquea, limita o estanca el ciclo de desarrollo favorable de las otras identidades.
Por ejemplo: el cultivo de bonsay ayuda a la persona a cultivar facultades como la paciencia, la atención a los detalles, el orden, lo sistemático. Sin embargo, obtiene eso a costa de limitar la expresión plena de una semilla que, de otro modo habría sido un frondoso arbusto. La planta es sometida a limitaciones tanto de nutrientes como de espacio vital y sus raíces son amputadas sistemáticamente. Esta relación no es particularmente sana en lo que al árbol respecta.
Otro ejemplo: Hay personas que se separan luego de una relación de pareja, pero una de ellas continúa enamorada. Si la otra persona se aprovecha de esta situación, la relación deja de ser sana.
Respeto
Respeto es el reconocimiento del otro como una identidad autónoma y con motivaciones propias. El respeto implica reconocer los derechos y el espacio de los demás. Es reconocer la individualidad de cada quién y sus diferencias contigo. Es reconocer que los demás tienen motivaciones que no siempre coinciden con las tuyas.
[feature_box style=”18″ title=”Causas%20de%20irrespeto” alignment=”center”]
- Hay una tendencia muy fuerte en nosotros a no aceptar ni valorar lo que es diferente a nuestra manera de ser. Esto puede hacer mucho daño pues crea relaciones donde, sistemáticamente, se descalifica al otro que es distinto.
- El consenso social, que podría funcionar como un espacio de acuerdos y aceptación, ha funcionado más como una tiranía de consenso sobre aquellos que se escapan de la norma. La segregación de personas por su religión, su color de piel, su preferencia sexual y su lugar de nacimiento, dan fe de ello.
- Otra fuente de irrespeto es el egoísmo. Una persona egoísta, es incapaz de pensar en el otro. Va a buscar siempre su beneficio al precio que sea. El otro sólo es un medio para un fin.
- La comunicación confusa es otro factor clave en el irrespeto. Las partes deben expresarse con honestidad y escuchar con verdadera apertura. No se debe decir lo que el otro quiere escuchar ni se debe escuchar sólo lo que se desea escuchar. Tampoco ayuda entresacar ideas sueltas para atacar o contratacar. La comunicación no debe ser una lucha sino el camino de la paz.
- La falta de acuerdos claros que se cumplan. Gran parte del respeto viene dado por la habilidad de crear acuerdos claros. Luego de que se crean, es vital que se cumplan. Si no se cumplen, se está irrespetando al otro y también a uno mismo. Yo diría que el respeto es fundamento para la confianza. Si no hay respeto, tampoco hay confianza.
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La base de toda relación sana, es el respeto
En resumen, una relación sana requiere del encuentro de identidades cuya interacción sea benéfica para ambos, o al menos que no dañe a ninguno de los dos. Para esto se requiere:
Una buena comunicación que permita el entendimiento mutuo.
Acuerdos que faciliten la coexistencia en un equilibrio consensuado de las partes.
El cumplimiento de dichos acuerdos.
Todo esto conlleva a una actitud respetuosa que construye una relación sana.
Preguntas: De acuerdo a lo anterior, de cero (no respeto) a diez (respeto absoluto), ¿Cuánto respetas a tu pareja? ¿Cuánto crees que te respeta a ti?
